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lunes, 6 de octubre de 2014

LASERTERÀPIA. NUEVO EQUIPO EN EL CENTRO.

Recientemente, nos ha llegado la “estrella “de los aparatos destinados a ayudar en la rápida recuperación de las lesiones más comunes en escalada: el equipo de Láser.

A continuación os explicaré de manera resumida que es un equipo de Láser, cómo funciona, para qué sirve y que efectos consigue, así como las contraindicaciones.

Para comenzar, he de decir que la laserterapia está considerada como uno de los medios físicos de terapia más efectivos en diversos campos, pero sobre todo, en lesiones del aparato musculo esquelético. He comprobado en muchísimas ocasiones, no solamente en mi vida como profesional especialista en lesiones deportivas, sino mucho antes, que el láser consigue minimizar al máximo los tiempos de recuperación de algunas lesiones, y eliminar el dolor en casi todas.

Existen más de 3000 estudios examinados que demuestran su eficacia, incluso en los casos en que la cirugía es una opción razonable, puede no ser tan indispensable operar y mucho menos determinante.
En este articulo, hablaré solamente de los usos del Láser en rehabilitación.

Usamos la terapia láser en columna vertebral, en el Síndrome cervical, en artrosis y en artritis; en capsulitis, tendinitis, fracturas, esguinces, dolor de espalda, y todas las afectaciones musculares y de ligamentos.

El Laser funciona por inducción de los bioestimuladores a los tejidos y nivel celular, para modular los procesos metabólicos locales y sistémicos de la regeneración.

Es una terapia totalmente inofensiva, que se realiza mediante aplicación externa, indolora y no presenta ningún tipo de toxicidad para los tejidos, debemos, además decir, que es la única terapia que induce a la regeneración celular con los siguientes efectos:

REPARACIÓN RÁPIDA DE LOS TEJIDOS

Los fotones de luces de un láser penetran profundamente en los tejidos y así dan energía para la formación de ATP ( trifosfato de adenosina). Esta ATP permite a la célula absorber los nutrientes y eliminar los desechos mucho más rápido.
Así, la recuperación de tendones, ligamentos y demás estructuras, es, ATENCIÓN, dos tercios más veloz que utilizando  otras terapias.

RÁPIDA FORMACIÓN DE COLÁGENO

El colágeno es la proteína primordial requerida para la formación de tejido nuevo o la reparación del viejo. Es la proteína más común en el cuerpo. El Laser, acelera el proceso de formación de colágeno y en ello reside su capacidad extraordinaria de regeneración de los tejidos dañados.

ACELERACIÓN DEL SISTEMA LINFÁTICO Y REDUCCION DEL EDEMA

Cuando hay inflamación, los vasos sanguíneos solo son capaces de eliminar el agua como componente  de dicha inflamación; el otro componente que son las proteínas impuras, no pueden eliminarse solamente con la acción de los vasos. Estudios han demostrado que el laser aumenta el tamaño de los canales linfáticos, y rápidamente remueven el deterioro de las proteínas.
La terapia láser aumenta a su vez el flujo sanguíneo y la revascularización ( forma capilares nuevos, aportando más sangre a la zona) con lo cual la regeneración del tejido es óptima y rápida.

COMO FUNCIONA?

El efecto biológico del laser terapéutico está basado en la luz del laser, que es organizada y limpia , de gran pureza y con una sola longitud de onda. Este tipo particular de luz da lugar a reacciones de curación en las células, que tienen una serie de elementos fotosensibles.
En el momento de la aplicación del láser no se percibe ni vibración ni calor, ni sonido alguno.

CONTRAINDICACIONES

En la actualidad, solo se acepta como contraindicación absoluta, la incidencia directa del haz de luz en la retina.
Excepto esta limitación, son contraindicaciones relativas las siguientes:

Hematoma reciente
Presencia de marcapasos
Procesos agudos infecciosos
Presencia de procesos neoplásicos ( tumores)
Cardiopatías descompensadas
Hipertiroidismo
Embarazo
Epilepsia
Antecedentes de foto sensibilidad.


Realmente si se analiza el amplio espectro de posibilidades terapéuticas según diagnósticos, con el escaso número de señalamientos en cuanto a contraindicaciones, es un privilegio contar con un medio tan noble y poco invasor.
En nuestro centro disponemos del equipo de laser de diodo que actúa por infrarrojos, que es el tipo de laser utilizado en fisioterapia.

Qi Salut.
Miramarges 10, Vic

Telf: 626 319 766



viernes, 29 de agosto de 2014

Dolor permanente en los dedos por desgaste de cartílago

No imagináis la de veces que me han preguntado en la consulta “Soy escalador. ¿tendré artrosis de mayor?”

Sí. No te engañaré… Casi seguro que sí.

Las articulaciones del cuerpo cuentan con el cartílago que les permite moverse con suavidad. Este cartílago, entre otras funciones, también protege al hueso de golpes o sacudidas.

Si bien conforme pasan los años, el propio uso  cotidiano de las articulaciones, aumenta el riesgo de un desgaste progresivo de sus tejidos cartilaginosos, es evidente que en nuestro modus vivendi o deporte, la escalada, esta perdida gradual viene en muchos casos acelerado, y obviamente sus consecuencias, como son la creciente rigidez, limitación de movimiento y destrucción de la articulación, no nos son para nada extrañas a los fisioterapeutas especializados en lesiones de escalada.

Por ello, en su mayor o menor medida, si eres escalador, tu actividad provoca esa repercusión y eres más susceptible de sufrir un trastorno erosivo de la articulación.

Ya mucho más severamente, y quizá más ilustrativo a los efectos de este bloc, Puedo añadir que sabemos de escaladores, que concentrados durante años escalando en un claro abuso de vías de lances y dinámicos repetitivos, ese notorio desgaste del cartílago les llega a niveles de incluso parcial ausencia (o total) resultando ser causa directa a posteriori, a que sus huesos sean susceptibles de lesionarse o incluso fisurarse más fácilmente.

En todo caso, y antes de profundizar, debo concretar que la patología que evalúo en este post, es concretamente aquella que se produce en el cartílago de las articulaciones como resultado de un esfuerzo excesivo o realizado de forma inadecuada reiteradamente, y manifestándose su daño en un desgaste (muy cercano a lo irreversible) de este cartílago y por ende, de sus inmediatas consecuencias:  

Lo digo porqué (y muy importante) no podemos confundir a pesar del parecido de sintomatologías que existen entre el daño aquí estudiado (daño tendente a artrosis, como desgaste o desaparición de cartílago y/o sobrecarga de articulaciones) con otras patologías distintas (pero de parecida sintomatología externa) como pueden ser la artritis (inclusive la postraumática) o como pueden ser también los síntomas derivados de capsulitis, tendinitis o luxaciones y/o fracturas, etc… que requerirían, evidentemente, de distinto enfoque fisioterapéutico y/o distintas propuestas de tratamiento de fisioterapia a las aquí a seguido comentadas.

Será siempre prudente pues, ante la manifestación inicial de estos síntomas, recurrir también a un buen profesional que pueda ofrecer una muy importante correcta orientación Diagnostica. Procurar una Resonancia Magnetica Nuclear (RMN) serán un elemento muy valioso para ello, si bien también es cierto que un buen TAC o una buena RX (precisos) igualmente nos mostrarán un correcto diagnostico.

Cuando debo alarmarme?. Es un síntoma de alarma, el tener una rigidez (con dolor en las articulaciones) y un sonido crujiente al mover la articulación. Es también un síntoma de alarma, una inflamación de la articulación que con el tiempo vemos que conduce a una deformidad.  

Inicialmente estos síntomas pueden ser intermitentes, pero si con el tiempo y con una debida observación personal, somos conscientes que normalmente, las mañanas siguientes a un día de escalada, acusamos claramente dolor y inflamación, no estará de más, acudir a que nos lo valore el profesional.

Respuestas al daño: La respuesta natural del cuerpo es evidente: Ante un inicio de desgaste de cartílago o su desaparición, como parte del intento de reparación, se forman restos óseos (osteofitos) en los bordes de las articulaciones y su consecuente también disminución de espacio articular. El dolor y la inflamación acompañaran.

La respuesta del escalador lesionado sin embargo es curiosa: Por un lado, observo la del escalador previsor que acude a tratamiento: Lo aplaudo. Por otro lado, la del escalador “sufrido”: Escalador que aprende inicialmente a vivir con la evolución o fase primaria de la lesion, es decir, aprende a seguir escalando con inflamación, principios de artrosis, algias y/o inclusive de reumatismo hasta que una de dos: O la ya preocupante evidencia de algia aguda, el dolor se vuelve intolerable, con evidentes indicios de deformidad o desgaste de los músculos circundantes y acude a tratamiento o la del escalador que efectivamente sabe somatizar o “anestesiar” subjetivamente el dolor llegando o pudiendo incluso escalar, el resto de su vida con sus consecuencias de rigidez y posible surgida fragilidad del hueso de la articulación, pero sin dolor.

En esta respuesta inicialmente tolerada por el escalador, o cuando la patología no recibe tratamiento, o si el tratamiento se inicia muy tarde, puede ocurrir que en estadios finales se haya causado una completa degeneración de la articulación. En estos casos, si los tratamientos conservadores (no quirúrgicos) no alivian el dolor o si la articulación y su movilidad están limitadas, puede llegar a ser necesaria inclusive, una intervención quirúrgica.

La operación,  resultará en la mayoría de los escaladores, una difícil solución a asumir, pues en ningún caso nos asegurará la posibilidad de continuidad de nuestra actividad, si bien favorablemente permitirá, recuperar una limitación de la movilidad sufrida y/o minorar el dolor que de una manera u otra, impedía ya parcial o totalmente su quehacer cotidiano. Debo no obstante, reconocer que conozco escaladores que (mundo fanatismo) escalan con rigideces, anquilosamientos y prótesis increíbles.

PREVENCIÓN. De todo ello, llegamos a la conclusión que los escaladores que ya tenéis articulaciones previamente dañadas, o aquellos que habéis  tenido problemas anteriores de lesiones en esas articulaciones, es importante prever o dedicarse un tratamiento Preventivo, para que esta inflamación, daño o lesión no derive o involucione a una patología crónica, que a la larga  os haga necesariamente amigos inseparables de los antiinflamatorios, químicos farmacéuticos y en el peor de los casos quirófano.

Según el caso y actitud de cada escalador, se desprende pues el recomendar dos tipos de tratamiento distintos: Uno, y primero: Ante una  señal inicial, que podríamos definir (más que de curación) como un tratamiento meramente preventivo y de esperanza en que solo sea un breve episodio de nuestra vida escalatoria, (muy indicado también para aquellos escaladores que saben que no abandonaran en años sus proyectos) con un tratamientos pautado a largo plazo , periódico, claramente encauzado a una relajación muscular y mejora  del flujo sanguíneo en las zonas específicas, y progresivo enriquecimiento muscular de las zonas adyacentes, para fortalecer y ayudar, globalmente, toda la estructura articular.

Y un segundo, paliativo crónico, para aquellos que ya habéis, con los años y fanatismo, llegado casi al estado de una artrosis crónica o osteoartritis secundaria, etc. y que en definitiva, (mal me pese decir-lo) habéis aprendido a escalar con los dedos "butifarrones" y ya sin cartílago!

TRATAMIENTO. A modo pues solo de referencia, indico algunas apreciaciones o consejos:  el tratamiento requiere que se aplique con profundo conocimiento de la etiología o causa del daño. Sorprende ver aun hoy día,  por ejemplo, tratamientos a pacientes con inflamaciones (afectados de artritis y no de artrosis) con presiones y extraños estiramientos totalmente desafortunados. En todo caso, en fases de crisis o fases iniciales (agudas) de la lesión, no podemos descartar recurrir a antiinflamatorios, calmantes o incluso en casos severos, recurrir puntualmente a infiltraciones: No obstante, hay que tomar  consciencia que ello puede llevar a un mero autoengaño, y, ante la desaparición aparente del dolor (que no de la lesión) esto desemboque en una lesión crónica. Por eso, mi apunte en insistir que lo mejor es un buen tratamiento a largo plazo y periódico con criterio Preventivo. En fisioterapia específica, la Termoterapia, la iontoforesis y los ultrasonidos me han resultado particularmente eficaces en el alivio de dolor. La electroterapia y potenciación muscular en la recuperación de limitación de movilidad y atrofia, y la cinesiterapia, son sin duda alguna, un elemento esencial para trabajar la deformidad articular siendo a la vez, la magnetoterapia sigue siendo hoy por hoy, uno de los tratamientos más efectivos  en la regeneración. No entro a valorar en este articulo los casos de artroplastia (remplazo de articulaciones) o aplicaciones de “factores de crecimiento” dado que estoy acotando mi artículo a escaladores con lesiones que con el tiempo podrían desembocar en artrosis y su prevención.

El Quiromasaje, y masaje de los músculos alrededor de la articulación afectada, puede aliviar eficazmente el dolor y la rigidez de la artrosis. Es preciso, no obstante, ir con cuidado cerca de aquellas articulaciones con inflamación aguda. Asimismo, un masaje corporal general y/o adyacente, puede ayudar a aliviar la tensión y dolores en otras partes cercanas del cuerpo, activando el flujo sanguíneo.

La Acupuntura resulta principalmente efectiva ( y sumamente eficaz en dedos y codos) en verdad, en todas las articulaciones pequeñas. Su buena práctica, apunta a mover los líquidos estancados y promover la circulación de la energía y la sangre en aquellos puntos en donde hay dolor, que generalmente  se debe a un bloqueo. El resultado será una reducción de la inflamación, un alivio duradero del dolor y mejora de la movilidad. El tratamiento es particularmente efectivo si se inicia en los primeros estadios o a modo preventivo (de manera periódica y regular) nos alargará muy sanamente la vida de nuestras articulaciones. Afortunadamente son muchos los escaladores que en los últimos años están tomando ya consciencia de ello.
 
El Yoga ofrece suaves asanas, relajación, y relajación permitiendo a las articulaciones moverse trabajando sobre las estructuras de los tejidos blandos de alrededor. Se ha mostrado claramente eficaz en afectaciones de cartílagos y articulaciones de rodilla, cuello y caderas. Por ende, su trabajo continuado nos aportara ese plus intrínseco de firmeza, fuerza, flexibilidad y elasticidad, que de seguro nos vendrán bien en nuestras escaladas.


Terapia nutricional. Una buena orientación en nuestras dietas nos llevará a una buena alimentación preventiva: Eexisten realmente, algunos nutrientes que sirven e intervienen de manera específica a la metabolización, formación y/o regeneración del cartílago y de los huesos y su mantenimiento saludable, ellos son las proteínas, ciertas vitaminas (esenciales D y C), minerales y oligoelementos como el silicio y el magnesio, además del calcio y el fósforo. Los minerales, de hecho, tienen un papel muy relevante, cada uno con una función específica en el metabolismo óseo y articular, lo cual refleja también su importancia, lo significativo por ello, es saber cómo debemos consumirlos.




viernes, 22 de julio de 2011

ROTURA DE POLEAS. Lesión de poleas y Taping.


Uno de los problemas más común sufridos por los escaladores son las lesiones en los dedos. Y de manera muy significativa, las lesiones localizadas a lo que llamamos el sistema articular de poleas: Una serie de cinco vainas de forma anular (con nomenclatura de A1 a A5) distribuidas a través de la longitud del dedo. (A1 ubicada mas proximal a la palma de la mano, y A5 al final) que sostienen o abrazan el Tendón Flexor cerca del hueso.
Es curioso saber que las estadísticas han objetivado que el sistema articular de poleas es mucho más fuerte y curtido en los escaladores asiduos que en los individuos sedentarios: En los escaladores hay lo que llamamos una adaptación degenerativa (o evolutiva) de la mano del escalador que se “curte” durante la práctica y el tiempo.
Sin embargo, también es cierto que esas mismas practicas de escalada reiteradas, con cargas, tensiones y sobrecargas, a la vez que fortalecen ese curioso sistema articular, se acercan muchas veces a lo que podríamos denominar su carga máxima posible de tolerancia, con el peligro de una inminente rotura de las mismas. La rotura se produce cuando aparece esa sobrecarga sobrepasando el limite anatómico de sostenibilidad.
De ahí, que con regularidad, sean los escaladores más insistentes o fanáticos, individuos que con el tiempo y la práctica de la escalada han asimilado una intensidad de dolor (rozando muchas veces ese limite de sobrecarga) sin hacer caso de las advertencias naturales que les da el propio cuerpo, y por ello, son quienes sufren dentro de los deportivas, esta particular lesión con más asiduidad.
Como curiosidad comentaré que hay estudios que han llegado a determinar que la resistencia media de rotura de las poleas en un individuo adulto normal, está en hasta unos 650.N. Sin embargo es evidente que la fuerza de resistencia máxima de sobrecarga de las poleas, es totalmente particular, especifica e individual, dependiendo en todo momento de la constitución y antecedentes traumaticos de cada persona.
Debo decir que existen casos, de sobrecargas traumáticas extremas, donde A2, A3 y A4 se ha roto simultáneamente. Evidentemente el señal es una “pequeña explosión” para nada bonita, ni en ruido, ni a la vista!
SINTOMAS y EVOLUCIÓN PROBABLE:
Si eres un escalador y sufres de dolor en un dedo o rotura de polea, sabrás que esto es un verdadero y doloroso hándicap para nuestra actividad. No obstante, cabe decir que una lesión de polea puede recuperar muy favorablemente y no necesariamente te impedirá volver a escalar.
Hay incluso casos de escaladores con multi-fractura de polea A2, A3 y A4, por ejemplo, que tras la curación y recuperación, hoy día siguen escalando por encima del 7c.
ADVERTENCIA: Si has leído hasta aquí, seguramente es porque estas buscando una solución EN INTERNET de tu lesión o dolor: Debes saber que sin ver tu lesión o explorar tu mano, yo no puedo decir lo que le pasa a tu dedo y que, evidentemente, por internet no se te curará. Por ello, a pesar de cualquier recomendación que leas aquí, al llegar al final del articulo debes asumir que TIENES que ir a ver a un profesional médico para el correspondiente diagnóstico. El autodiagnóstico es un error fatal. Para que me entiendas: Es lo mismo que meterse a escalar en “solo” una via de granito de 6c de 3 largos... cuando tu nivel de escalada es precisamente… 6c. , ya me entiendes…
CASOS DE ALARMA: Como fisioterapeuta involucrada en el mundo de la escalada, y a los efectos prácticos para la practica de este deporte, distingo especialmente tres claras situaciones ante estas lesiones:
A) La rotura de polea completa y/o incompleta por sobrecarga.
En dicho diagnostico, lo más común, es que el escalador se lesione en el anular y/o dedos medios. Como ya he avanzado la señal o síntoma más evocador, es ese temido “ruidito” como que se rompe una rama (¡Poop!) En dicha situación, es necesario urgentemente como ya he dicho (ineludible) visita al médico, un buen diagnostico de un profesional de la salud y eficiente rehabilitación.
La rotura de una polea puede llevar a subsecuentes roturas de otras poleas, todo esto puede terminar en una condición de gravedad crónica conocida como bowstringing.
Hoy día, la ecografía se revela como un método diagnóstico sencillo, rápido, barato y eficaz para diagnosticar esta lesión. Se estima que la sensibilidad de la ecografía para la descripción de las lesiones de las poleas de los dedos es de 98%, y la especificidad es del 100%.
Es importante la diferenciación entre rupturas completas de una o varias poleas pues, salvo excepción, dependiendo de ello variará el enfoque terapéutico, en conservador o quirúrgico.
B) Cuando aparentemente no hay rotura pero….
Si no hay ningún “ruidito”, probablemente se trate solo de una distensión pero no debemos descartar en ningún caso la rotura: Cabe estar muy atentos durante las próximas horas y observar la posible aparición de síntomas como pueden ser una leve de sensación de corriente, aumento del dolor hasta tal punto que sea incluso difícil determinar el punto de origen del dolor en el dedo y/o inflamaciones evidentes del dedo afectado.
De encontrarte en este caso, no tengas pereza en ir al médico. Con el tiempo lo agradecerás.
C) Cuando hay “susto” o aviso pero no hay rotura.
Muchas veces, el escalador puede intuir, por las propias advertencias o avisos que le da su sabio cuerpo, que está a punto de lesionarse o se encuentra en el extremo de tolerancia de su cuerpo.
Esencialmente y en numerosas ocasiones nuestros dedos dan esos síntomas de aviso, bien en forma de dolor, apareciendo tras una sesión de entrenamiento leve rutinario o simplemente tras una escalada no muy intensa bien en hinchazón o color. Lo cierto es que nos está advirtiendo de la fatiga de nuestro sistema articular y la clave, para esquivar la futura lesión grave, es prevenir y EVITAR.
¡Si un dedo duele, uno debe parar!
Ante el “susto” o advertencia de nuestro organismo, en la medida de lo posible, uno debe procurar un tiempo de reposo. Asimismo, tras el reposo, prudencialmente cambiar por un tiempo los hábitos de entrenamiento y escalada hasta que no se experimente ningún dolor en el dedo afectado. Dejar por un tiempo a repetir esos ejercicios o pasos de rutina agresiva que estamos trabajando de modo intenso; Enfocar por un tiempo nuevas técnicas de entrenamiento sin fuerza y prescindiendo de las pequeñas regletas o presas agresivas; Abandonar por un tiempo el trabajar sobre esos proyectos duros que últimamente estamos escalando, en resumen: ser prudentes.
Desgraciadamente, la experiencia, me ha echo observar que (salvo casos excepcionales) estoy tratando con un peculiar colectivo (los escaladores) cuya mentalidad se muestra impotente para cumplir el imperativo terapéutico de la inactividad acogiéndose a cualquier excusa, para seguir “pasando de todo”.
Si se me permite el comentario, esta claro que todos los escaladores, de una manera u otra, nos auto-perjudicamos mediante dos grandes enemigos: (Esta es otra de nuestra particular naturaleza): El primero es el ego, que constantemente nos dice que también somos capaces de escalar ese pequeño grado inmediatamente superior que ya casi hemos conseguido; El segundo, irónicamente, es no querer perder el grado asumido perdiendo tiempo (el que dura la curación de una lesión) para recuperarse. Porque nos obsesionamos. MAL. Muy Mal. Una lesión mal curada, nos llevará inevitablemente a bajar nuestra futura actividad... en verdad no se porque digo eso.. ¿Ya lo sabes, verdad?.
En tal caso, mi consejo es ponerse en manos de un profesional que nos certifique la situación de “solo susto” y en su momento, cuando sea apropiado, reiniciar progresivamente la fuerza e intensidad de la actividad, inicialmente siempre utilizando TAPE.
¿POR QUÉ USAR TAPE? Esta acción o medida terapéutica que de entrada puede parecer una tontería, y ha soportado y acarreado un amplio debate entre fisioterapeutas, a mi criterio realmente no lo es.
Verás: Realiza una mirada rápida alrededor de un Plafón o Rocodromo. Indudablemente verás una plétora de dedos envueltos con vendaje terapeutico. Seguramente, la mayoría de esos vendajes que veras colocados son realmente un placebo para los escaladores. Sin embargo, el uso del tape, sufriendo síntomas leves de dolor en los dedos o tras el prudente período de recuperación de una lesión, puede ser bastante más eficaz de lo que parece a simple vista:
Hay pues, dos grandes razones para que pongas TAPE en un dedo: Primera, para LIMITAR UN MOVIMIENTO del dedo potencialmente perjudicial; La segunda, para RECORDAR y acordarte con su visión que tenemos una lesión en proceso de curación. No subestimar éste detalle como un instrumento de rehabilitación
COMO HACER UN TAPING (en lesión de poleas)
Primero y ante todo recuerdo que el uso del TAPE no cura ni evita la lesión. El TAPE no sustituye las poleas y tampoco esto complementa su fuerza. Por ello su colocación y uso debe ser extremadamente diligente y vigilante.
El Tape debe incidir directamente sobre la zona afectada y debe usarse para evitar un agravamiento limitando el movimiento potencialmente agresivo que inevitablemente querrán adoptar nuestros dedos al coger una presa o agarre. Es muy importante un buen sistema de vendaje. He visto vendajes en los dedos de excepcionales escaladores, que son claros ejemplos (mostrados en la universidad) del como NO se debe hacer NUNCA un taping y llegando incluso a la categoría de forma y malos grafitis de Metro.
Hay diversas maneras de colocar un vendaje terapéutico. Os dejo un enlace para echar un vistazo:
Siendo muy detallistas o técnicos, la protección de TAPE seguramente solo es extremadamente útil para dos de los múltiples tipos de lesiones de poleas: Las lesiones en A2 y A3. Esa acción de TAPE eficaz, es correcta y debe restringir la capacidad del dedo a doblarse.
LA RECUPERACIÓN ES UN PROCESO. Considera el dolor como un índice de daño. Si un movimiento no es doloroso, (incluyendo “durante” su calentamiento) seguramente vamos por buen camino. En ese caso, recomiendo seguir reduciendo la estrechez del tape progresivamente durante un número de semanas hasta notar que ha desaparecido el dolor. NOTA: en determinados casos el dolor ya no desaparecerá del todo y desafortunadamente hay que acostumbrarse a escalar/vivir con ello.
Es evidente que sí has leído hasta aquí, aparte de la acción de ponerse TAPE en tu dedo que ahora te duele, razonablemente me vas a preguntar, "¿Qué más puedo hacer?".
Las soluciones son las que ya sabes: Médico profesional y rehabilitación.
EL ULTRASONIDO para mi se muestra como un método muy efectivo y valorado con muy buenos resultados.
El LÁSER. La terapia de láser aparece sumamente eficaz. El Laser, acelera el proceso de formación de colágeno y en ello reside su capacidad extraordinaria de regeneración de los tejidos dañados. Los fotones de luces de un láser penetran profundamente en los tejidos y así dan energía para la formación de ATP ( trifosfato de adenosina). Esta ATP permite a la célula absorber los nutrientes y eliminar los desechos mucho más rápido. Así, he comprobado que la recuperación de tendones, ligamentos y demás estructuras mediante una correcta y buena  aplicación resulta dos tercios más veloz que utilizando  otras terapias.
El MASAJE siempre resultará efectivo y nunca negativo. Sin embargo, es únicamente otro punto más de apoyo a otras medidas terapéuticas que puede acelerar la recuperación.
ESTIRAR. O traccionar el dedo para que se separen las carillas articulares, favoreciendo de este modo la irrigación sanguínea en la capsula articular ( en otras palabras , estirarse los dedos, sin llegar a crujirlos.
Nada mejor que un buen estiramiento (metódico) de dedos. Estira y calienta.
Y en su caso, ponte en manos de un buen entrenador/a (a modo de ejemplo Eva Lopez) que planifique un entrenamiento adecuado, estudiado, progresivo y metódico.
Y SOBRETODO, RECUERDA DIRIGIRTE A UN PROFESIONAL DE SALUD Y NUNCA HACERTE UN AUTODIAGNOSTICO BASADO EN LO QUE PUEDAS LEER.

sábado, 12 de marzo de 2011

Pautas de Rehabilitación en DEDOS

Existen diferentes lesiones en estas estructuras tan maravillosas y pequeñas de nuestra mano.
Desafortunadamente en nuestro deporte, la escalada, merecen una especial mención por su frecuencia las lesiones capsuligamentosas digitales (esguinces y luxaciones) cuya localización es a nivel de la articulaciones interfalangicas medial y distal de los dedos largos, con incidencia también muy predominante la interfalangica distal y quizá más ocasionalmente las producidas en las articulaciones metacarpofalangicas y del pulgar, las tendinitis o tenosinovitis de tendones flexores y extensores de dedos, y las lesiones de poleas.

Dado que se ha escrito ya muchísimo sobre cada una de ellas, en este articulo de LESIONES DE ESCALADA, solo pretendo mencionar un índice de evaluación personal que a criterio propio, por praxis, autoevaluación y estadística me han dado el resultado más óptimo:

Según su entidad distingo dos claros episodios o diagnósticos: Lesión leve (cuya recuperación nos permitirá un regreso óptimo y normal a nuestra actividad de escalada) y lesión grave (cuya reentrada al deporte de escalada, vendrá condicionado o menoscabado) y, en todo caso, siempre pendientes de una buena reeducación de movimientos y trabajos.

Marco general y tiempo: Decir que en las luxaciones y los esguinces en los dedos ,el mecanismo lesivo suele ser de aparición brusca, por ejemplo por un agarre en monodedo; estas lesiones demandaran un protocolo de actuación distinto a las requeridas en tendinitis cuyo mecanismo de lesión ha sido por sobrecarga.

El tiempo de recuperación varia de un individuo a otro, pero si generalizamos, una lesión cuyo mecanismo lesivo ha sido traumático, tratada a tiempo, en su fase aguda, suele recuperarse mucho antes que una lesión a la que no se ha dado importancia y se cronifica.

Lesión leve: El período de recuperación durará tan solo unos días. Ocasionalmente requiere al inicio una contención flexible siguiendo el eje del dedo y, en ocasiones englobando también el dedo vecino.

He percibido óptimos resultados, mediante uso y aplicación de corrientes de baja frecuencia de efecto trófico, ionizaciones y ultrasonido. Se evidencia una muy recuperación por aplicación pautada de crioterapia y en su momento (luego) y en el caso de las tendinitis, tratamiento de termoterapia combinado con masajes descontracturantes del antebrazo y mano, (tras el trabajo de movilización activa de los dedos).

En la lesión grave, (teniendo en cuenta el hecho de que a veces se ha requerido una intervención quirúrgica) además de todas las pautas básicas anteriormente descritas (para lesión leve) cabe diferenciar tres fases:

Fase de inmovilización con su específica rehabilitación, además, enfatizando en la lucha contra el edema (drenaje linfático, posición de declive, crioterapia palmar) y contra el dolor mediante electroterapia.

Una segunda fase (inmediata a la retirada del medio de contención), dónde aplico genéricamente, masaje circulatorio del antebrazo y mano, combinado con crioterapia, movilización pasiva de las estructuras.

En aquellos casos que se realizó cirugía, además del tratamiento anteriormente descrito, es importante el masaje cicatrizal precoz.

En la tercera fase, se introducen ejercicios contra resistencia, para fortalecer toda la musculatura implicada, isométricos, isotónicos, estiramientos suaves y la eventual utilización de una ortesis dinámica en extensión.

Las lesiones antiguas no tratadas (hecho muy común y usual en muchos escaladores) son abordadas por mi, sistemáticamente como lesiones crónicas( lesiones de más de tres meses de evolución que no han sido tratadas); con lo cual, su recuperación será larga, (y quizás muy difícil psicológicamente), ya que lleva implícita una inactividad pautada. En este tipo de lesiones la rehabilitación debe ir también enfocada a suprimir el dolor, y además, se aplicaran técnicas destinadas a liberar adherencias (masajes, micromovilizaciones, MTP, ultrasonido)


Como siempre, recuerdo que es muy necesario realizar un correcto diagnóstico y tratamiento de dichas lesiones, teniendo en cuenta que, para obtener un resultado final satisfactorio, es preciso evitar tanto el exceso terapéutico como la insuficiencia del mismo.

Siempre valoro la derivación inmediata del paciente al medico especialista, cuando no lo veo claro, para complementar el diagnóstico con pruebas de imagen.

miércoles, 16 de junio de 2010

LESIONES MAS FRECUENTES

Quisiera hacer un resumen de las lesiones más frecuentes en nuestro deporte, acompañándolo de imágenes para hacer más claro este post.

El cuerpo humano esta diseñado para la marcha; en la escalada el soporte del peso corporal recae principalmente en las extremidades superiores incluso en las puntas de los dedos, por lo tanto estamos hablando de cargas que van mas allá de lo que nos es fisiológico; cargas supra fisiológicas.

Las diferentes estructuras del cuerpo humano, necesitan una adaptación a estas cargas, y cada adaptación lleva un ritmo; así, los músculos se adaptan rápidamente pero los huesos, tendones ligamentos y poleas lo hacen de manera lenta. Cuando hay un desequilibrio en esta adaptación, aparece la lesión.

La alta demanda a la que sometemos a nuestras extremidades superiores, desemboca en dos tipos de lesiones:

1.Lesiones agudas
2.Lesiones por sobrecarga

También existen lesiones típicas dependiendo de a disciplina;
Así , en la escalada tradicional las lesiones mas frecuentes son debidas a traumatismos por caída en extremidades superiores y en inferiores; En la escalada deportiva , se dan en hombro, codo, muñeca, manos y dedos por sobrecarga y también en la escalada en boulder, al que sumamos traumas por caída en extremidades inferiores.

Importante recalcar que cuanta mas experiencia y habilidad, más índice de lesiones.

A continuación podéis ver unas imágenes de la anatomía de las zonas mas susceptibles de lesionarse en la escalada.








LESIONES TRAUMATICAS AGUDAS

Por orden de incidencia son:
Lesiones en los tendones de los dedos
Laceraciones i abrasiones en la piel
Dislocaciones en los dedos
Fracturas de muñeca
Lesiones en las poleas de los dedos



LESIONES POR SOBRECARGA

Las causas de estas lesiones son principalmente las cargas repetitivas, y las supra fisiológicas es decir, aquellas que están por encima de nuestras posibilidades.
Casi siempre, una lesión por sobreuso, se da debido al desequilibrio entre la adaptación del músculo contra la de los tendones y poleas que es mucho mas lenta, así, se solicita un trabajo desmesurado a las estructuras que se adaptan lentamente.

POLEAS
Las poleas de los dedos, son unas vainas que rodean el tendón; la fuerza a la que son sometidas mientras escalamos según el tipo de agarre, puede lesionarlas fácilmente.

















Hay distintos grados de lesión en las poleas (tecnicamente algunos las marcan como desde el grado I al IV), el pronostico de recuperación de rotura de poleas no es del todo desfavorable, aunque la polea no regenera y muchos escaladores tienen lo que se llama “ cuerda en arco” que es el tendón libre no sujetado por la polea a causa de su desgarro.














LUMBRICALES

Otra lesión común es la del desgarro de los músculos lumbricales, que son los músculos pequeños que hay en la palma de la mano.
Esta lesión provoca un dolor en el recorrido flexor de la palma de la mano; es una lesión propia de escaladores de alto nivel, y normalmente se da en agarres en “monodedo” del tercer dedo.


LIGAMENTOS COLATERALES INTERFALANGICOS

Es una lesión frecuente, cuyo mecanismo viene dado por la suma del agarre en monodedo mas la inestabilidad.
Los síntomas son dolor y aumento de volumen de la articulación interfalangica y aunque el pronostico es favorable, a veces queda como secuela dificultad en la extensión y algo de inestabilidad.





TENDINITIS
La tendinitis es la lesión de la unión músculo-tendinosa.
En la escalada se da en los flexores de muñeca, en el bíceps braquial, en la unión mio tendinosa de flexores y extensores ( epicondilitis y epitrocleitis) y en extensores de la mano.


Las tendinitis son lesiones muy frecuentes en los escaladores, y ya en otros artículos hemos hablado de ellas extensamente.



PINZAMIENTO DEL MANGUITO ROTADOR

En esta lesión, el tendón queda pinzado justo por debajo del acromion al elevar el brazo, lo que provoca un dolor que se irradia a la cara lateral del brazo. (hombro)





Esperando que os haya servido de ayuda, no me queda más que recordaros que ante un leve sintoma de dolor, siempre os pongais encontacto con un médico y/o fisoterapeuta.